Insomnio
¿Por qué no puedo dormir? ¿A menudo te encuentras dando vueltas y vueltas por la noche? No poder conciliar el sueño de inmediato y preocuparse por todas las cosas diferentes. Se siente cansado al día siguiente y no puede concentrarse completamente mientras está en el trabajo o en la escuela. El insomnio es un trastorno del sueño común. Con el insomnio, es posible que tenga problemas para conciliar el sueño, permanecer dormido o dormir bien. Esto sucede incluso si tiene el tiempo y el entorno adecuado para dormir bien. El insomnio puede interferir con sus actividades diarias y puede causarle sueño durante el día.
El insomnio a corto plazo puede ser causado por estrés o cambios en su horario o entorno. Puede durar unos días o semanas. El insomnio crónico a largo plazo ocurre 3 o más noches a la semana, dura más de 3 meses y no puede explicarse completamente por otro problema de salud. Vivir con insomnio puede ser un desafío. Afortunadamente, existen tratamientos efectivos que pueden ayudar a las personas a conciliar el sueño más rápido, permanecer dormidas y sentirse más descansadas durante el día.
La terapia cognitiva conductual para el insomnio (CBT-I o CBTI) es un enfoque corto, estructurado y basado en evidencia para combatir los frustrantes síntomas del insomnio.
¿Qué puedo hacer para dormir mejor?
La terapia cognitiva conductual para el insomnio se enfoca en explorar la conexión entre la forma en que pensamos, las cosas que hacemos y la forma en que dormimos. Trabajamos para identificar pensamientos, sentimientos y comportamientos que contribuyen a los síntomas del insomnio.
Los pensamientos y sentimientos sobre el sueño se examinan y prueban para ver si son precisos, mientras que los comportamientos se examinan para determinar si promueven el sueño.
El tratamiento suele durar entre 6 y 8 sesiones, aunque la duración puede variar según las necesidades de la persona.
La TCC-I a menudo se denomina tratamiento de múltiples componentes porque combina varios enfoques diferentes. Las sesiones pueden incluir componentes cognitivos, conductuales y educativos.
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Intervenciones cognitivas: la reestructuración cognitiva intenta cambiar los pensamientos inexactos o inútiles sobre el sueño.
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Intervenciones conductuales: el entrenamiento de relajación, el control de estímulos y la restricción del sueño promueven la relajación y ayudan a establecer hábitos de sueño saludables.
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Intervenciones psicoeducativas: proporcionar información sobre la conexión entre pensamientos, sentimientos, comportamientos y sueño es fundamental para la TCC-I.